Fuente. Jamarín Diciembre 2007.
Regato del cauce. Lancho Gordo. Enero 2008.
Arroyo Boguillas en su desembocadura en el río Tiétar.
Enero 2008.
Cascada El diablo. Garganta Gualtaminos (Tramo Medio).
Enero 2008.
Cuatro vídeos realizados en Navidades en Villanueva de la Vera con un elemento en común: el agua.
Como podemos ver en los vídeos, la situación este invierno en La Vera es francamente preocupante, si se pasea por la comarca la percepción del líquido vital está bajo mínimos. Esperemos que la situación revierta, para lo cual es fundamental la concienciación de todos nosotros, debemos actuar activamente para frenar el cambio climático que nos acecha y poder seguir disfrutando del agua, de sus propiedades y ventajas:
Agua, que en la Vera, es la dicha de los sentidos y del aliento que los baña. Agua, aire que mana gota a gota, anegado de luz. Agua, dulce y oracular que aquí calma la sed y el espíritu. Agua, fuente de todas las potencialidades de la vida, origen y final de todas las cosas del universo. Agua, que pacientemente modeló estas tierras, símbolo de la Gran Madre, asociada al nacimiento y al principio femenino. Agua, de la fertilidad y del frescor, la humedad y la savia, equivalente líquido de la luz. Agua de lluvia, el poder inseminador de los dioses y fuente de la vida. Agua, flujo continuo de la inconsciencia y del olvido, capaz de disolver, purificar, lavar, regenerar, revitalizar e infundir la vida.
Las palabras en cursiva pertenecen a Mahmud Darwisch.
Como podemos ver en los vídeos, la situación este invierno en La Vera es francamente preocupante, si se pasea por la comarca la percepción del líquido vital está bajo mínimos. Esperemos que la situación revierta, para lo cual es fundamental la concienciación de todos nosotros, debemos actuar activamente para frenar el cambio climático que nos acecha y poder seguir disfrutando del agua, de sus propiedades y ventajas:
Agua, que en la Vera, es la dicha de los sentidos y del aliento que los baña. Agua, aire que mana gota a gota, anegado de luz. Agua, dulce y oracular que aquí calma la sed y el espíritu. Agua, fuente de todas las potencialidades de la vida, origen y final de todas las cosas del universo. Agua, que pacientemente modeló estas tierras, símbolo de la Gran Madre, asociada al nacimiento y al principio femenino. Agua, de la fertilidad y del frescor, la humedad y la savia, equivalente líquido de la luz. Agua de lluvia, el poder inseminador de los dioses y fuente de la vida. Agua, flujo continuo de la inconsciencia y del olvido, capaz de disolver, purificar, lavar, regenerar, revitalizar e infundir la vida.
Las palabras en cursiva pertenecen a Mahmud Darwisch.
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