Hace días, o quizá semanas, o meses, tengo la intención de crear un Blog. Primer problema, con un equipo Mac no es fácil por el tema de las compatibilidades, pero decido seguir adelante. Me quedé en blanco con el título del Blog, pues mi intención es realizar comentarios sobre mi comarca de nacimiento: La Vera. Trato de aportar ideas, sugerencias y críticas que contribuyan a conservar su riqueza cultural y natural. También fotografías, imágenes y otros recursos artísticos que apoyen estos objetivos.
Esta mañana recordé una entrada del Ficcionario de mi amigo Luis Calero (Cáceres, 1963) maravilloso libro que recopila la capacidad prevaricadora y simbólica del lenguaje.
La entrada recordada es Veracidez: sabor agrio que algunas verdades dejan en nuestro paladar. Atendiendo a su gusto, las verdades también se clasifican en dulces, ácidas y amargas.
Veracidez y su definición encajan pefectamente con mis intenciones, tengo ya título así que sin pensarlo más, inicio este blog.
Esta mañana recordé una entrada del Ficcionario de mi amigo Luis Calero (Cáceres, 1963) maravilloso libro que recopila la capacidad prevaricadora y simbólica del lenguaje.
La entrada recordada es Veracidez: sabor agrio que algunas verdades dejan en nuestro paladar. Atendiendo a su gusto, las verdades también se clasifican en dulces, ácidas y amargas.
Veracidez y su definición encajan pefectamente con mis intenciones, tengo ya título así que sin pensarlo más, inicio este blog.
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